Jacobo se encontró con un espacio en el que los niños realizaban actividades manuales acompañados por sus docentes coordinadores previo al desayuno que todas las mañanas comparten.

El director, Esteban Tamiz, explicó que "lo que más les gusta a los chicos es jugar, entonces aprovechamos para reforzar contenidos a través de lo lúdico".  También comentó que una de las actividades destacadas en esta edición de la Escuela de Verano es el ajedrez.

Deportes, juegos, trabajos manuales, club de lectura, apoyo pedagógico y refrigerio son las principales acciones que reúnen a los chicos que asisten a la escuela durante el año tanto como a otros niños de zonas cercanas.  

Las Escuelas de Verano se consolidan en distintos puntos de Misiones como espacios de integración y recreación, donde niños, jóvenes y adultos tienen la posibilidad de incorporar saberes no tradicionales, acceder a bienes de enriquecimiento cultural como clubes de lectura o cine y al mismo tiempo reforzar las materias que se dan durante el ciclo lectivo.

Al respecto Jacobo dijo que "fomentamos estos espacios de contención para que los chicos puedan expresarse a través del arte, compartan y disfruten aprendiendo. Este tipo de actividades mejora la autoestima personal y los vínculos grupales".